Reseña: Blanco como la nieve

Título: Blanco como la nieve

Fecha de publicación:  febrero 2015

Autora: Salla Simukka

Editorial: La Galera (Bridge)

Páginas: 261

Precio: 17,95€

Tras enfrentarse a la mafia internacional del narcotráfico en Rojo como la Sangre, Lumikki Andersson huye a Praga, donde conoce a una chica que asegura ser su hermana y que la introduce en uno de los mundos más peligrosos que existen: el de las sectas destructivas.

Decidí seguir con la segunda parte de esta trilogía porque, aunque no sea muy fan de los thrillers, este, al ser tan light, pues me atrapó. A decir verdad, me esperaba una continuación de saga diferente. Y es que en Rojo como la sangre pude sentir en todo momento lo que pasaba por la mente de Lumikki. Este segundo libro me ha desconcertado a más no poder. Y aún sigo perpleja.

En Praga, Lumikki tiene que volver a enfrentarse a un agujero de su pasado. Hay algo en su familia que le atormenta. No tiene idea de por dónde empezar a buscar, y le aterra hacerlo por lo que pueda descubrir.

Volvemos a encontrar una narración súper ligera, pero a la vez profunda. El libro se te va de las manos, como el anterior. Quizá esa sea la magia de Salla. Por eso sus libros están dando la vuelta al mundo.

Motivos:

Confiar en una extraña es algo que Lumikki no suele hacer, pero en Praga la vida parece tener otro color. En mi opinión, baja demasiado la guardia, pero sabe defenderse.

He encontrado relleno  en una historia sin demasiado fin. Marea más que otra cosa. 

Es como si el calor del verano adormeciera los sentidos de nuestra protagonista hasta hacerla aburrida.

La parte interesante y movida llega de parte de la mafia. Eso sí que ha sido bueno. La bomba clave. La indignación queda patente de mano de la autora, y eso, siempre es bueno. Porque podemos saber su punto de vista ante algo como la manipulación, el control y sometimiento humano, y todo por dinero y poder.

Y nada, que el secreto de la familia de Lumikki no hace si no acrecentarse. Así que es necesario saber cómo termina esta trilogía. Porque soy capaz de buscar a esta chica, arisca como un gato callejero, y pegarla contra la pared hasta que me lo cuente.

Sobre la autora: 

Salla Simukka (1981) es un nombre muy establecido en la literatura juvenil finlandesa. Su salto a la fama internacional se ha dado con la trilogía 'Me llamo Lumikki', de la que Rojo como la sangre es la primera parte, con publicación en 50 países de todos los continentes. Como indicó el jurado del premio Topelius cuando lo ganó, "sus obras contienen mensajes importantes, tanto sobre los individuos (el derecho a ser uno mismo) como sobre la sociedad (las presiones del poder, la libertad de elección)".

¡Gracias a  

por el ejemplar!