Reseña: El escondite de Grisha

Título : El escondite de Grisha

Fecha de publicación:  2011

Autor: Ismael Martínez Biurrun

Editorial: Salto de Página

Páginas: 256

Precio: 18, 50€

Del autor ganador de dos premios Celsius 
(2009 y 2011) a la mejor obra fantástica del año

 Dos veces huérfano con apenas diez años, Grisha ha prendido a protegerse por sí solo y a esconder sus secretos. Todas las tardes se refugia en la biblioteca y escribe con los ojos cerrados lo que parece el diario de otro niño que vive a miles de kilómetros y a quien no conoce. ¿Quién es el otro Grisha? ¿Es posible robar la vida de otra persona...?

Olmo es un bibliotecario como los demás. Incapaz de poner nombre a sus propios sentimientos, huye de un pasado siniestro y busca consuelo en los brazos de la mujer policía que siguió su rastro. Cree que por fin ha puesto orden en su vida, hasta que se tropieza con Grisha. Olmo no contaba con volver a verse reflejado en los ojos de un niño malherido. Con atravesar un infierno ajeno para regresar al suyo.

Provenimos de muy lejos. Todos somos huérfanos. Todos estamos adoptados temporalmente,

Tal y como se explica en la frase anterior, todos somos huérfanos. Decir que, nada más leerla, me hizo reflexionar bastante. Imaginaos: somos, por así decirlo, donados a una vida espontánea, que no elegimos ni planeamos; llegamos y vivimos. Nos adoptan por un tiempo, pues la estancia en la vida no es permanente. Se nos acoge un tiempo para dar cabida a más huérfanos que, como nosotros, llegan a un mundo sin planearlo ni quererlo. Simplemente, son adoptados...

En la primera novela que leí de Martínez Biurrun, Mujer abrazada a un cuervo, ya consiguió cautivarme su estilo narrativo y sus pinceladas poéticas y, por su puesto, metafóricas. Pero, El escondite de Grisha, me ha sorprendido aún más, si cabe. 

Es una novela cruda, oscura, y realista con toques fantásticos que hacen temblar de intriga y de emoción. El comienzo de la lectura es muy normal, pero, caemos. Picamos en el anzuelo como un pececillo confiado. Eso me ha pasado a mí. Su primera persona hace que imaginemos más nítidamente las propias reflexiones de Olmo, cuyo pasado nos mantiene en vilo hasta que las líneas dejan de existir en el libro.

Sé que existe un miedo ancestral a la oscuridad. Que un silencio demasiado largo es un vientre hinchado de futuros sobresaltos. Y sé que la noche tiene un puñado de trucos mágicos para hacer que los hombres se sientan desprotegidos, disminuidos.

Encontramos a dos protagonistas que, al igual que se enfrentan sus miradas, sus personalidades y sus vidas chocan buscándose. Se atraen sin quererlo, y de manera inexplicable, conectan. Olmo y Grisha confían, lo que los llevará a un viaje de ida sin retorno:

-Red Forest -me informa el conductor. ¿No relampaguea un filo de orgullo en su voz? -. Most radioactive place on Earth. El Bosque Rojo. Un nombre que parece sacado de los hermanos Grimm, pero que está más cerca de Dante. El lugar más radiactivo de la Tierra.

Motivos:

La trama está urdida con un disimulo que hace que el final sea catatónico. Es cierto que muchas novelas son predecibles, situaciones que podemos visualizar antes incluso de que ocurran, y sí, en la historia en la que se ven envueltos Olmo y Grisha, encontramos situaciones que llegamos a deducir líneas antes de que nos las relaten de primera mano; pero otras, tan sorprendentes e inesperadas que no hacen más que acrecentar la fascinación.

No hablo de una obra de arte, hablo de un libro auténtico, emocionante de principio a fin, maquinado con una perfección asombrosa y que deja sin aliento. ¡Una imaginación que vuelve la piel de gallina! Y exclamo porque desearía realizar una lista con todos los adjetivos que necesito para describir esta obra, pero se me haría inmensa y diríais: "Está un poco loca, dejémosla...".

Lo que quiero decir es que, leer una novela que te transporte a un lugar emocionante y te ponga en situaciones peliagudas siempre termina por darte que pensar. Y la manera en la que Olmo nos describe lo que sucede, la forma en la que nos colamos en su piel y en el don de Grisha, hace que esta novela alcance un gran y merecido estatus.

¿Recomendable?

Si aún os lo preguntáis, podéis leer un fragmento a ver qué tal os parece: Leer.

Aunque creo que la evolución tanto de la trama como de los personajes que la dan vida, se merece una oportunidad.

Enamorada de las reflexiones que he absorbido como una esponja, y, cómo no, me declaro "enganchada" a las letras de Biurrum. (Y la portada... *-* Son obras de arte impresas en libros amorosos. Sin palabras.)

Hipótesis, intuiciones, pensamientos maliciosos: dicen que las paralelas son líneas rectas que se cortan en el infinito, pero en rigor nadie ha ido hasta allí para comprobarlo. ¿Por qué desconfiar de su tenacidad? ¿Por qué estamos tan seguros de que en algún punto flaqueará su equilibrio? ¿Quién sabe lo que ocurre más allá de nuestros ojos?

Autor:

ISMAEL MARTÍNEZ BIURRUN
(Pamplona, 1972) es licenciado en Periodismo y trabajó como guionista antes de dedicarse en exclusiva a la escritura. Ha publicado las novelasInfierno nevado (Equipo Sirius, 2006), Rojo alma, negro sombra (451 editores, Premio Celsius de la Semana Negra de Gijón a la mejor obra fantástica de 2009 y Premio Nocte de la Asociación Española de Escritores de Terror) y Mujer abrazada a un cuervo (Salto de Página, 2010), con la que obtuvo de nuevo el Premio Celsius en 2011. Ha participado con sus relatos en las antologías Visiones (AEFCFT, 2006),Hombre Lobo (451 editores, 2008) y Aquelarre. Antología del cuento de terror español actual (Salto de Página, 2010). El escondite de Grisha es su cuarta novela. Vive en Madrid, muy cerca de una biblioteca pública. ¡Gracias a por el ejemplar!